Un renting no deja de ser un alquiler de un vehículo a largo plazo. A cambio de una cuota fija, disponemos del coche durante varios años con una serie de servicios incluidos. En muchos casos tenemos claras las ventajas que supone para una empresa o autónomo, pero ¿podría ser interesante para un particular?
En los últimos años, cada vez más personas particulares están optando por esta forma de acceder a un vehículo. Vamos a analizar a continuación cuáles podrían ser las ventajas y desventajas. Quédate hasta el final, ya que te contaré cuál es, para mí, la principal.
Principales ventajas:
Cuota fija y sin sorpresas.
Cuando compramos un vehículo, rara vez se tienen en cuenta todos los costes asociados: la depreciación, el mantenimiento, el seguro, los impuestos, etc.
Depreciación
Estamos viendo cómo algunos vehículos —especialmente los que utilizan tecnologías híbridas o eléctricas— sufren depreciaciones muy elevadas en los dos o tres primeros años. A menudo olvidamos que el coste real de un coche no es solo lo que pagamos al comprarlo, sino la diferencia entre el precio de compra y el de venta posterior. Esta diferencia viene determinada por la depreciación.
¿Qué nos aporta el renting en estos casos? La posibilidad de fijar de antemano esa depreciación, protegiéndonos así del riesgo de caídas bruscas en el valor del vehículo debido a cambios en el mercado.
Cambio de coche cada pocos años
Suele ser una buena opción para aquellas personas a las que les gusta cambiar de coche cada tres o cuatro años. Vender un coche como particular puede convertirse en un auténtico dolor de cabeza. Con el renting, te olvidas: lo devuelves y listo.
Cuando vendes un coche por tu cuenta tienes dos opciones: vendérselo a un particular o a un profesional. Si optas por la vía del particular, tendrás que hacer fotos, preparar el anuncio, atender a los interesados, etc. Luego incluso podrías tener que responder por posibles vicios ocultos. Todo esto lleva tiempo y esfuerzo. Si lo vendes a un profesional, los descuentos suelen ser bastante agresivos.
Sin entrada inicial
A diferencia de la compra, en muchos casos no se requiere una entrada. Esto te permite conservar tu capital e incluso invertirlo para obtener rentabilidad.
Gestiones y papeleos
La empresa de renting se encarga de todos los trámites legales y administrativos. De hecho, incluso pueden entregarte el vehículo a domicilio.
¿Para qué tipo de particulares puede ser interesante un renting?
Para quienes no quieren atarse a un coche durante años.
Para quienes no hagan un número excesivo de kilómetros al año.
Para quienes buscan control financiero y reducir los riesgos de tener un coche en propiedad.
Para quienes no quieren perder tiempo en gestiones, mantenimiento o reventa.
Desventajas para un particular:
Limitación de kilometraje
Los contratos de renting a largo plazo incluyen un límite de kilómetros. Esto implica que debes prever aproximadamente el uso que harás del vehículo. Siempre recomiendo fijar una cifra algo superior a la esperada, ya que superar el límite implica cargos extra. Si dispones de otro vehículo, siempre puedes repartir el uso.
Cancelación anticipada
Normalmente, los contratos incluyen penalizaciones por cancelación anticipada. Al fin y al cabo, la empresa de renting asume una serie de costes, y estas penalizaciones ayudan a cubrirlos.
No obstante, algo que muchas personas no saben es que estos contratos se pueden subrogar a otra persona o entidad. En ese caso, no habría penalización, y es una práctica bastante habitual.
Conclusión
Si prefieres dedicar tu tiempo a lo que realmente te interesa, no quieres atarte a un coche durante muchos años o simplemente quieres olvidarte de las preocupaciones que conlleva tener un vehículo en propiedad, el renting para particulares puede ser una muy buena opción.
Déjanos un comentario si crees que hay alguna ventaja o desventaja más que se nos haya pasado.
Y si estás valorando la opción del renting como particular, ponte en contacto con nosotros y te asesoraremos personalmente.